EL DISEÑO INDUSTRIAL COMO INTEGRANTE DIFERENCIADOR
DE LOS PRODUCTOS DE CONSUMO
Jon Solozabal Basañez
El Diseño Industrial es para muchos compradores un componente determinante
a la hora de adquirir un producto. Un objeto bien diseñado y fabricado
industrialmente tiene muchas ventajas sobre otros productos de calidades y
prestaciones análogas, ya que éstos carecen de la capacidad de comunicación,
persuasión y convicción necesarias para atraer al comprador.
La decisión de realizar buen Diseño Industrial significa plantear una estrategia
empresarial a largo plazo y sin improvisaciones tácticas. Es una decisión que
recae en la dirección de la empresa. Esta medida proporcionará una calidad
específica a la empresa y engendrará el Diseño Corporativo que será
comunicado y traducido adecuadamente como parte muy importante de la
identidad Corporativa interna y externa de la empresa.
El Diseño Industrial es por lo tanto un elemento fundamental de la Cultura
Global de la empresa. Dicha cultura necesita un planteamiento correcto y una
dirección empresarial capacitada para desarrollar los conceptos de sus
productos y contratar a los diseñadores y equipos de desarrollo. La conquista
de cotas de mercado, la ocupación de nichos / huecos en el mercado y el
desarrollo coyuntural de las estructuras empresariales en unos mercados casi
estancados, exigen un Diseño Industrial orientado hacia el mercado y al ajuste
de costes con el fin de alcanzar los objetivos operativos de la política de
marketing de la empresa.
El Diseño Industrial representa un gran reto económico para la dirección de las
empresas, su planteamiento estratégico es necesario y no tiene alternativa.